Del envejecimiento Activo y los Programas de Activación de la Memoria 

La Organización Mundial de la Salud definió el Envejecimiento Activo como: el proceso de optimización de oportunidades de salud, participación y seguridad con el objetivo de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen"

En las políticas de Envejecimiento Activo se trata de potenciar las capacidades de la persona cuando envejecen, de llevar una vida productiva en la sociedad y en la economía; Dentro de estas políticas se  ha convocado el 2012 como el año Europeo del Envejecimiento Activo y de la Solidaridad intergeneracional, durante el cual se deberán subrayar los beneficios del envejecimiento activo y su contribución a la solidaridad entre generaciones, y se podrán publicitar iniciativas prometedoras para apoyarlo. El Libro blanco sobre el envejecimiento activo es una aportación a este evento y es la linea base en la que deben fundamentarse todas las actuaciones en materia de mayores. El documento destaca la necesidad de que todos los estratos sociales interioricen una serie de prioridades a fin de afrontar con éxito las transformaciones debido a los cambios demográficos ya en marcha. Se lanzan entre otras las siguientes propuestas

  

• Asumir que el desarrollo individual se prolonga a lo largo de todo el ciclo de vida de las personas, lo que conlleva una repercusión social
• Instaurar una política económica que contemple todo el ciclo vital y facilite las relaciones humanas, reserve tiempo para los cuidados personales, la solidaridad y las relaciones sociales lo que mejorara la economía y la seguridad de las personas mayores.
• Desarrollar, fomentar y difundir un concepto de las personas mayores ajustado a los derechos que les corresponden como parte integrante de la ciudadania, sin discriminaciones, ni desigualades de trato.
• Facilitar su partitcipacion activa en todos los ambitos y a todos los niveles de la sociedad y potenciar la solidaridad intergeneracional.
 

Dentro de las actuaciones dirigidas a personas mayores, una de las mas comunes son los llamados programas de Activación de la Memoria. Debemos tener en cuenta los cambios que afectan al proceso de envejecimiento. Los de tipo cognitivo debido al paso del tiempo, como los problemas de atención, la dificultad del lenguaje, la alteración de la capacidad de abstracción, entre otros. Otros factores importantes son los cambios psicosociales. Los primeros días tras la jubilación son fundamentales en la vida de las personas. Se puede caer en un aislamiento social, dado que la gente que les rodeaba ayer sigue su ritmo y ya no saben dónde encajar. Esto podría provocar ansiedad y estrés que dificultan a su vez nuestras capacidades mentales.

Hemos de tener también en cuenta que el cuerpo sufre un "desgaste", como los cambios sensoriales, perdida de audición, de vista, de movilidad y que existen patologías como la hipertensión, la diabetes, o la falta de sueño, que disminuyen nuestra atención.

Los mayores enemigos de nuestro cerebro son la rutina, el estrés, la depresión, la pereza, el inmovilismo, el pesimismo, la falta de aficiones, dormir poco, una dieta poco equilibrada, el consumo de tabáco y otras drogas, etc

Debemos empezar a fortalecer nuestro cerebro, entrenando a nuestras neuronas para que estas pueden conectarse entre ellas, y poder aprovechar todos los recursos para mantenernos activ@s.

Para ello existen numerosos programas específicos de activación de la memoria que tienen lugar en muy diversos ámbitos ( unidades de día, centros de mayores, residencias...)cuyos objetivos son principalmente los basados en la "prevención geriatrica":

Mantener la independencia funcional de las personas, aumentar la esperanza de vida autónoma e independiente, y mejorar en conjunto la calidad de vida de nuestr@s mayores.